Consideraciones generales

La historia de la lengua española se ha basado, fundamentalmente, en el análisis de los textos literarios. En el caso que nos ocupa, el léxico de la navegación, la literatura náutica cuenta con importantes textos elaborados tanto por expertos navegantes como por importantes cartógrafos, matemáticos, geógrafos y cosmógrafos. La política sostenida por Felipe II para la promoción y mejora de la construcción naval atlántica promovió la elaboración de los libros de náutica: Martín Fernández de Enciso (1519), Francisco Falero (1535), Pedro de Medina (1545), Martín Cortés (1551), etc.

En los últimos decenios del siglo XX, asistimos a una reactivación de esta literatura, gracias a la mediación del Museo Naval de Madrid y al interés de numerosos eruditos amantes de la historia, las ciencias y las letras. No solo se editaron obras hasta entonces inéditas, sino que también se reeditaron otras consideradas fundamentales para el conocimiento de la evolución de las técnicas y el arte de marear. El expurgo textual de estas obras ha sido exhaustivo y bajo él subyacen importantes proyectos de investigación como son, entre otros, el Diccionario de corpus DICTER; los distintos grupos de investigadores que se ocupan de la historia de la terminología y del léxico especializado, y de la literatura y el discurso científico y técnico dentro de la red temática «Lengua y Ciencia»; el Nuevo Tesoro Lexicográfico del Español, s. XIV-1726 (NTLE): Tesoro lexicográfico del español marinero anterior a 1726; el propio Corpus Diacrónico del español (CORDE); o el Nuevo Diccionario Histórico del Español (NDHE), que actualmente se encuentra en desarrollo.

A estas investigaciones se viene a sumar ahora el proyecto «Los fondos documentales del Archivo General de Indias de Sevilla y su interés para la lexicografía histórica española».